Hoy os voy a
hablar de un lugar en Praga donde se juntan: la vanidad, la avaricia, la
lujuria, la muerte, un filósofo, un ángel, un astrónomo y un cronista.
Siempre he pensado que los
viajes te dan la posibilidad de encontrarte con verdaderas “rarezas”, y sin lugar a dudas, una de las rarezas
tecnológicas más extravagantes creada por el hombre, es el reloj astronómico de
Praga.
¿Qué
puede tener de infrecuente este reloj? ¿Por qué debería uno tomarse el tiempo (nunca
mejor dicho) para ver
a este reloj marcar las horas? La respuesta es porque es raro,
extravagante, extraño, sale de lo normal. Y las cosas raras motivan a la
curiosidad.
Todo lo que sé de este reloj astronómico lo aprendí de un folleto informativo rescatado
de una agencia de información turística en la plaza de la Ciudad Antigua de Praga;
y del monólogo del guía turístico que contaba la historia a un grupo de
turistas españoles frente al reloj.
El reloj astronómico de Praga es
del Medievo y tiene la particularidad de,
además de dar las horas como todo reloj, indicar las posiciones
de los astros y los meses del año. Algo así como un antepasado
de una de las funciones básicas de un Smartphone de hoy.
Este reloj tiene un
componente matemático y astrofísico por un lado y por otro, uno artístico y de
alegorías. Entre ambos conforman un conjunto atractivo hasta para el turista
menos interesado en el medievo o en los relojes.
El
momento más importante y divertido es cuando da la hora en punto. Es fácil
darse cuenta porque la plaza se llena de grupos de turistas, cámaras, palitos
de selfies, todo un zoo viajero frente a un reloj.
A la hora
señalada empieza a sonar una campanita y aparecen los doce apóstoles,
al mismo tiempo unas figuras alrededor bailan y se mueven significando la vanidad, la avaricia, la
lujuria y la muerte. En otro sector además la personificación
de otros seres icónicos en forma de esculturas: un filósofo, un ángel, un
astrónomo y un cronista.
Es muy difícil ver todo lo que se
mueve y prestar atención al conjunto por lo que recomiendo grabar en cámara fija toda la escena y poder
verlo luego en casa tranquilo para ver los detalles de cada movimiento.
El toque
misterioso y el que mas me gusta y atrae, se lo otorga la leyenda que dice que quien
construyó el reloj fue cegado para
que no pudiera construirse otro igual. Digamos que quienes
contrataron al genio que fabricó el reloj astronómico eran unos empleadores que
se tomaban muy en serio el tema de la exclusividad en aquella época.
No sabemos si la historia fue
real o no, lo que si le escuché decir al guía en español, es que al día de hoy
aún no se sabe al 100% como funciona el reloj astronómico de Praga.
Cuando
visites Praga, ya sabes donde tienes que estar a la hora en punto. Cada hora desde las 8:00 a
las 20:00 horas.
Hasta pronto!
By Montse.